Llegó a la escuela en octubre, era tan solo un tronco desnudo y silencioso allá, en un rincón de la sala. Cada mes la visita a un parque de Madrid le dio vida, las hojas y frutos de La Quinta de Los Molinos y el Parque del Retiro, las pastas solidarias cocinadas al fuego del cariño del árbol de la Navidad, los pájaros frioleros de La Dehesa de la Villa. Se hizo musical en febrero, Parque Juan Carlos I, maracas y cañas de lluvia colgaban de sus ramas y multicolor con flores, mariposas y libélulas con la salida al Jardín Botánico… hoy, expresión de la esencia de un recorrido intensamente vital, se llama Amigo Árbol y es trabajo por proyectos.
Nació alejado de lo ortodoxo. No nos preocupó mucho etiquetarlo, teníamos la excusa perfecta, somos distintos los del Primer Ciclo de Infantil. La escasez del lenguaje verbal impide hacer preguntas a nuestros alumnos que den luz sobre intereses a trabajar. No fue una barrera, acostumbradas a leer en gestos y expresión de sentimientos, diseñamos un proyecto a su medida, unos poquitos planteamientos fijos que le dieron estructura organizada y vinculación con el currículo (no es imposible casar intereses reales y currículo oficial, solo hay que hacer otra lectura de las finalidades). Y lo hicimos modificando la actitud de la educadora, mente abierta, ideas prefijadas ni una, cargadas con la «cesta vacía en la salida», llena de gestos, manifestaciones y asombros, a la vuelta de cada uno de los parques. Y lo hicimos buscando objetos de aprendizaje en los entornos que más enseñan, los reales.
Aprendiendo desde la formulación de preguntas que presumimos pudieran ser motivaciones para nuestros chicos y que nos llevaron a investigar y buscar herramientas y soluciones, ideas creativas y lúdicas, viviendo cada detalle del proceso como promotoras de logros no como contenidos, sino como desarrollo y maduración.
Y hemos saltado del plano real al digital y en este proceso los chicos han avanzado, son exploradores de situaciones que preparan para lo actual porque son ricas y diversas.
Sin perder de vista nunca nuestra esencia de comunidad «dar llaves a las familias para abrir puertas de participación e involucración en la actividad educativa de la escuela». Han sido invitados a aportar opinión, información y/o recursos que hemos recopilado en Glogster y compartido con todos vosotros. Y lo hemos trabajado con el lenguaje de la escuela, hombro con hombro, familias, educadoras y niños enREDados…
Porque Amigo Árbol ha sido un proyecto integrador:
- de necesidad exploratoria y necesidad educativa,
- de perspectivas, la docente y la de las familias,
- de vínculos, con compañeros y seguidores… ¡muchos!
Hoy contentas, muy contentas con el premio que nos concede la Revista Educación 3.0 como ganadores. Agradecidas a todo su equipo por darnos la oportunidad de difundir «otra manera de hacer escuela», creemos que es muy importante el vehículo de la divulgación de experiencias. Sin duda el buen hacer está en muchas de las aulas pero si deseamos que ese cambio tan necesario tenga su espacio en la educación la publicación de proyectos y nuevas perspectivas además de ánimos pone alas».
¡Felicitación a todos los proyectos ganadores y a todos los participantes que ponen ilusión y esfuerzo en la mejor tarea del mundo, la educación!
Emocionada, una comunidad educativa, Escuela enREDada, os da las gracias Revista Educación 3.0…