El último de este curso, un taller de verano refrescante y con poder de asombro. Sí, el periscopio de un submarino muy especial ha logrado abrir de par en par los ojos de nuestros pequeños alumnos. Han manejado conceptos de límites difusos para sus recién estrenados cerebros «estoy dentro, en un sitio cerrado y te veo estando fuera» y a la vez sin un ápice de reparo, como si de un resorte se tratara, ponen en uso el pensamiento mágico y el papel y el cartón les llevan de las nubes de la semana pasada a las profundidades marinas esta.
Percepción y fantasía en ciernes sin cortapisas.
El tecleteo llenando artículos del blog os ha narrado esta y otro montón de aventuras educativas pero no ha sido la única opción. Este curso descubrí un importante aliado sin tradición en la escuela pero con más impacto que mis palabras, sonido e imagen casi en vivo y en directo, el vídeo. Es una herramienta más en la integración de nuevas tecnologías que estamos llevando a cabo, es una herramienta con finalidad didáctica y por qué no, afectiva.
Empecé como con el resto de instrumentos tecnológicos, la evaluación inicial de conocimientos previos cercana a bajo cero. Os lo cuento para que aunque los resultados sean muy mejorables los interesados indecisos vean en mi experiencia la condición de factible. Eso sí, he invertido tiempo y me vino muy bien un curso de formación (no os abruméis, fue cortito, un fin de semana) y no ha faltado, lo que más enseña, la retroalimentación de la labor puesta en contacto con la realidad, que si la música me gusta, que si se hace pesado, que es un tesoro… todo eso que se escapa a la percepción personal y que es necesario conocer para que el objetivo se cumpla, llegar a la cabeza y cuando se puede también al corazón.
En el proceso de elaboración he seguido indefectiblemente dos senderos, los que usan mis chicos todos los días, el del sentir y el del hacer.En el primero, he pasado de la comezón cada vez que me he puesto ante la pantalla con la cabeza llena de caras, gestos y movimiento ¡bullendo!, la tensión y concentración mientras iban tomando forma y la ternura y satisfacción al ver la presentación en el aire, volando autónoma.
En el segundo, poco a poco voy aprendiendo a trabajar con la suficiente sistematización para que el resultado sea digno y cumpla su cometido, pero muy atenta para no perder la frescura que da no sentirse tan cómoda en una estrategia que anule el ansia de exploración de otras. Así, entre ensayos y formación llegué a un pequeño esquema mental, mi guía:
- ¿Qué es lo que quiero contar? Mapa conceptual, la historia…
- ¿Con qué cuento? Imagen, grabación, audios, textos…
- ¿Cómo voy a comunicar? Seleccionar las herramientas para tratamiento de imagen, sonidos, crear y publicar vídeos (Picasa, Gimp, Power Point, Cyberlink Power Director, aTube…)
Y aunque a veces me queje y reniegue del trabajo que me dan sé que no es esfuerzo baldío. Poner ideas en orden, pensar en las personas a las que van dirigidos, sintetizar y priorizar en pocas frases objetivos y procedimientos con contenidos que sin estos «atrapa memoria» se perderían sin remedio, me han servido y el deseo permanente es que también os hayan servido.
Así es que haciendo honor al poder comunicador del vídeo educativo no os voy a describir lo que ha sido este taller en la escuela, os invito a visualizarlo y si lo he logrado mínimamente, dejaos llevar por la aventura y viajad con nosotros.
Este aprendizaje que comenzó hace 102 vídeos continuará… seguiremos creando atmósfera educativa ¡Feliz verano!
Marisa: una vez felicitar a tu equipo tanto de adultos y como no a los protagonistas principales: l@s peques.! Coincido plenamente contigo que el uso del vídeo es una gran herramienta, que nos permite captar instantes casi mágicos…Me ha encantado!
Y estoy segura que cuando llegue el momento de la reflexión personal sobre los logros conseguidos en el curso, serán más que satisfactorios. Y sino…»a los vídeos me remito»!
beset enorme
Silvina
Además de protagonistas son sus mejores espectadores, disfrutan un montón viéndose, reconociendo a los compañeros y volviendo a revivir las experiencias. Un abrazo grande ¡Feliz verano!
Q bonito Marisa!
Feliz verano a ti tb.
Q suerte tienen tus pequeños alumnos de ir a la escuela enredada. Es un lujo.
Cada vez q t leo m gusta más como trabajáis .
Un abrazo enoooooorme!
Muy feliz verano Yolanda 🙂 Y un montón de besos!!
Me parece que estáis haciendo una labor asombrosa. Habéis puesto palabras a todo lo que como maestra llevo años queriendo poner, la intención era esa, la vuestra, plena consciencia y libertad para que SEAN ellos mismos y les amemos a cada uno tal cual son. Enhorabuena
Muchísimas gracias por tu comentario y palabras de aprecio Patricia. Afortunadamente cada día somos más las personas que hemos decidido repensar qué y cómo lo estamos haciendo para llegar mejor a nuestros alumnos.
Un abrazo.